Rubin y la Gran Grieta

En esta Imagen de la Semana, la Gran Grieta parece dividir la banda brillante de la Vía Láctea situada sobre el Observatorio Vera C. Rubin de NSF-DOE, un Programa de NOIRLab de NSF, en Cerro Pachón. Esta prominente región oscura está formada por una serie de nubes de polvo frío llenas de formación estelar activa. Estas nubes son tan densas que bloquean la luz de las estrellas que hay tras ellas y crean esta oscura “grieta”.

El Observatorio Rubin, financiado conjuntamente por la Fundación Nacional de Ciencias (NSF) y el Departamento de Energía (DOE) de EE.UU., iniciará sus operaciones científicas a finales de 2025. Cuando esté terminado, utilizará su espejo de 8,4 metros y la cámara más grande jamás construida para la astronomía para iniciar un ambicioso estudio de una década de duración conocido como la Investigación del Espacio-Tiempo como Legado para la posteridad (LSST por sus siglas en inglés). Cada 3 o 4 noches, el telescopio tomará imágenes de todo el cielo del hemisferio sur para acumular un gran volumen de datos que ayudarán a responder algunas de las preguntas más difíciles sobre nuestro Universo. Una de las metas científicas del Observatorio Rubin es la detección de fenómenos que ocurren rápidamente en el cielo, conocidos como transitorios. Algunos tipos de eventos transitorios son las supernovas, las estrellas variables y los asteroides y se caracterizan por su rápido cambio de brillo o posición. El estudio de los fenómenos transitorios es un importante campo de investigación, ya que pueden proporcionar información relevante sobre los procesos que dan forma al Universo, y la frecuente recopilación de datos –como la que realizará el Observatorio Rubin–, que ayudará a desarrollar la próxima era de la astronomía de formas inimaginables.

El Observatorio Rubin es un Programa de NOIRLab de NSF, que, junto con el Laboratorio Nacional del Acelerador SLAC, operarán juntos a Rubin.

Esta foto fue tomada por Hernán Stockebrand, Embajador Audiovisual de NOIRLab.